viernes, 30 de marzo de 2018

Arreglos y reparaciones de la Ermita de Nuestra Señora la Virgen de Tebas

En este aspecto devocional de los “casitos” para con su Patrona, hay que consignar obras de reparación y mantenimiento posteriores a las de 1941.
 

Así nos encontramos con una nota suelta en un sobre acerca del asunto del camino de Tebas que dice: Las puertas de la ermita de Tebas hechas por los Hermanos Martín 1970, costaron 2,800 pts.
 
En 1980 se terminó la remodelación de la ermita, cuando fue objeto de iluminación interior al abrir una linterna en el techo de la nave, dándole una visión interior más alegre, ausentando el oscurantismo de la iluminación mediante velas, que al mismo tiempo ensuciaban el ambiente con su emisión de humos.
 
El único altar que había, era sencillo, de madera con dos columnas, fue reemplazado en 1.979 por un templete de alabastro, que ha sido cambiado otra vez en 1.997.
 
Félix Domínguez López describe en sus apuntes: “Completando la pared de la cabecera se abrían dos hornacinas laterales a ambos lados del altar encuadradas por pilastras y frontones hechos de ladrillo y enlucidos.
 
En el centro estaba colocada la imagen, « hoy en el templete», de Nuestra Señora de Tebas, una escultura del S. XVI a la cual visten por “moda barroca” cuando es una talla de gracia o bulto completo.  Ha sido restaurada por José Gómez y Gómez en Puerto de Sta. Cruz, localidad próxima a Trujillo, en 1.999.
 
En su corona de plata dorada en oro reza la inscripción “SENDO CURA Rtor. EL LICdo. D. DIONISIO CLAVER MAYmo. D. MATEO MARCOS DE LA V. AÑO DE 1.859”.
 
En los huecos laterales del altar que nos ocupa, estaban las imágenes de dos santos obispos: San Blas y San Gregorio, siendo de la misma época que la talla mariana y sin ningún valor artístico. Ambas hoy están situadas a los lados del templete, habiéndose sustituido San Blas por otra imagen más moderna y de escayola y menor valor que la anterior todavía.”
 
“En las gradas del antiguo altar, existía una inscripción cortada por el tiempo con letras romanas decadentes o góticas, Martín Gil las leyó y quedó constancia de ello de la siguiente forma: “. . . En las gradas del altar existe una inscripción que no pude leer por estar sus letras cegadas. Las letras son romanas decadentes y no góticas como dice Madoz al hablar de esta ermita. Supongo que una vez limpia, se podrá tomar un calco con facilidad y podrá leerse. Procuraré hacerlo. ” No pudo hacerlo.”
 
Como se indica anteriormente el año 1980 es cuando hay una actuación más en profundidad en la ermita. Puede fácilmente comprobarse por la placa de mármol puesta en la pared de la ermita. La realiza el Sr. Civantos. En dicha obra se hizo el templete actual, así como la renovación del piso; las puertas se hicieron de la madera donada por Paco González, así como también fue donación de lo anterior Mª Josefa… e Iluminada Jiménez. Fue regalo el conjunto de azulejos, que corrió a costa de Domingo Cordero de la Fuente.
 
Fue el momento en que se quitó el antiguo púlpito que había.
 
Los albañiles que intervinieron en dicha obra fueron: Marcelino Toro; Manuel Barco; Prudencio Barco; Pablo Iglesias.
 
Como curiosidades de esta obra se encontraron un conjunto de huesos humanos detrás del retablo o templete que tenía la imagen de la Virgen. Se hizo un tabique y se quedaron en el  mismo sitio por temor de que se pudiera paralizar la obra.
 
Al hacer las excavaciones para consolidar los cimientos se vieron una o dos sepulturas humanas excavas en piedra.
 
La obra consistió en levantamiento de un metro y poco más, de muros y columnas interiores. Tejado todo nuevo;  que posteriormente se le pusieron las tejas tradicionales.
 
La casa del ermitaño se adaptó para comedor de peregrinos a la ermita.
 
Última etapa, año 1996 hasta hoy

Es cierto que la devoción a la Virgen de Tebas es lo suficientemente fuerte como para que haya continuado durante muchos años, sin una dirección oficial. Pero también es importante que, para mayor organización y eficacia era necesaria la creación de una Hermandad, que al mismo tiempo fuera continuación de la que había habido anteriormente.  Así lo entendieron aquellos que elevaron la petición de creación de “La Hermandad de Ntra. Sra. Santísima Virgen de Tebas”, después de haber tenido una reunión con un grupo de feligreses de la Parroquia.
 
Por ello Juliana Fernández Cano, Antonia de la Fuente Fuertes y José Martín Escribano, elevan una petición de aprobación de los correspondientes estatutos y creación de personalidad jurídica pública, a dicha Hermandad. Esto se hace el 6 de Marzo de 1996.
 
La respuesta no se hace esperar mucho, a pesar de que las cosas de palacio van para despacio. El 16 de abril de dicho años se constituye dicha Hermandad y se aprueban los estatutos.
 
La Junta oficialmente queda presidida en 5 de Septiembre de 1996, por Juliana Fernández Cano, que en sesión extraordinaria  había sido designada por la Junta General, del 7 de Junio.
 
Y desde este momento empiezan a desarrollar sus inquietudes y deseos para con la devoción a la Santísima Virgen de Tebas y mantenimiento de su ermita.
 

Ya hemos visto la antigüedad histórica del sitio de ubicación de la ermita. Por eso, una inquietud que aflora enseguida, es la ausencia de una de las aras romanas que estaban aquí, denotando no solamente el interés devocional a la Virgen, sino la sensibilidad ante el expolio que frecuentemente sufren los pueblos, unas veces por incuria de sus vecinos, otras por picaresca de los expoliadores.
 
En este caso, tras las denuncias correspondientes quedó claro que dicha ara estaba en el museo de Cáceres, en la Consejería de Cultura y Patrimonio, depositada el 23 de octubre de 1997. Es un ara dedicada a IOVO OPTVMO MAXVMO.
 
Una de las primeras inquietudes es la solemnidad de la Romería, celebrada el tercer domingo de mayo. Dada la inquietud musical que siempre tuvo el pueblo de Las Casas, quieren tener un buen sitio para el coro, que precisamente se denomina “Virgen de Tebas”. Por ello al año 1999, previa aprobación de la asamblea de la Hermandad, se pide el asesoramiento del arquitecto diocesano. 

Aquí sí que se cumplió el refrán de “palacio”.
 
Se contesta con el permiso para su construcción el 26 de mayo del año 2000.
 

Si anteriormente se indicó la tendencia que había a que los pueblos fueran objeto de expoliaciones de objetos culturales y religiosos, le ha llegado el momento en que desaparece la imagen de S. Blas que se ubicaba en la ermita de la Virgen de Tebas. Ha ocurrido entre la fechas del 10 al 26 de Octubre del año 2002.
 
Ciertamente no es el valor económico lo que se valora, sino el sentimental religioso, pues la imagen es de escayola, de 1,10 m. aproximadamente de altura, y con una tasación de unos 1.500 €. Se pone la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil, pero no ha dado resultado.
 
En el afán del mantenimiento y decencia de la ermita, en el año 2003 se tiene una reunión en la que se aprueba la restauración de la ermita.
 
Entre las reseñas que se hacen en el acta de la Asamblea General de la Hermandad el año 2008 se anuncia una importante acción para el entorno de la ermita: Está previsto el ampliar el Ejido de la Ermita por la parte Sur y Este, unos 2 o 3 metros, para que el itinerario de la procesión quede más amplio, así como el espacio de la parte frontal de la Ermita.
 
La familia Rosario y Pilar González Fabián, donan gratuitamente este terreno, con la condición de que hay que levantar las paredes de piedra, para no perjudicar el entorno, y poner una “engarilla” para el acceso a la finca. En este terreno de donación hay varios olivos. Los cuales siguen perteneciendo a los donantes del terreno, a todos los efectos.
 
Corre el año 2009 y una nueva mejora se realiza en la presentación de la imagen de la Virgen de Tebas. Ese año estrena un manto valorado en unos 4.000 €, importe asumido por Juliana Fernández Cano y José Martín Escribano, y cofinanciado por ella. Fue la admiración de todos los romeros de ese año que acompañaron la imagen en la procesión.
 
Siguen las inquietudes de la Hermandad en la mejora no solamente de la imagen y la ermita de la Virgen, sino en que se sientan a gusto, junto a la Madre, los fieles que vienen a visitarla. Por ello se lanza la idea de hacer una pre-prospección, con el fin de dotar de un pozo de agua potable mediante sondeo.
 
Queda aprobado y su realización se tiene…
 
Si alguna persona ha habido destacada en los últimos años en el mantenimiento de la devoción a la Virgen de Tebas y todos sus entornos no cabe duda que ha sido la feligresa Antonia de la Fuente Fuertes. Por ello se la nombra presidenta honorífica de la Hermandad.
 
Así consta en el libro de actas:
 
“El día 28 de Marzo de 2010, en la Ermita de San Ramón de Casas de Millán, la Hermandad Nuestra Señora Santísima Virgen de Tebas, celebró su XIV Asamblea General Ordinaria, Anual y por unanimidad, dadas las circunstancias concurrentes en la persona de Dª Antonia de la Fuente Fuertes, por la labor que durante toda su vida ha desarrollado en favor de la Iglesia Católica, ayudando no solo a la Institución, sino a todas las personas que lo han necesitado y como principal iniciadora de la fundación de esta Cofradía, dado el resultado y la aceptación que la misma ha tenido entre todos los hermanos y personas de esta localidad, se acordó nombrarla Presidenta Honorífica de la Hermandad Nuestra Señora Santísima Virgen de Tebas.
 
Terminamos con un deseo: Que el bastón de mando que se le entregó a la imagen de la Virgen de Tebas, el día 8 de Mayo de 2008, no se lo arrebaten en otra ocasión, aunque es seguro, que éste se lo podrán poner o quitar, pero nadie le quitará el bastón de mando del amor sobre los casitos que tiene por madre y por experiencia de siglos.

lunes, 19 de marzo de 2018

El Camino a la Ermita de Nuestra Señora la Virgen de Tebas

Historia del camino a la ermita de los años 1970
 
Un Párroco con tan solo 10 años de experiencia parroquial, regenta los destinos espirituales de Casas de Millán. En su afán de cultivar la devoción a la Patrona, Ntra. Sr. La Virgen de Tebas, ha pensado en facilitar las continuas visitas que recibe, a pesar de la distancia de la ermita de dicha Patrona. Es D. José María Sánchez Mateos.
 
La idea del Párroco es tratada por diversas entidades locales. Vista la oposición que el dueño de “El Encinar” ponía, todos ellos, de una forma u otra, intervienen dirigiéndose a él, para rogarle secundara dicha obra.
 
Así nos encontramos con una carta por parte del Presidente de la Hermandad Sindical, Severo Clemente y Clemente, fechada el 18 de Marzo de 1971. Es de suponer que se han escrito otras varias, puesto que en la carta de contestación, dirigida a Juan Fernández, Alcalde en aquellos años, le dice: Con algún retraso he recibido su carta, y la de varios más, componentes de la Junta y autoridades, y sé que, ahora mismo, tengo otro par de cartas en San Sebastián.
 
Hay por tanto toda una movilización del pueblo por conseguir llevar a cabo la realización del camino.
 
¿Cómo se resolvió todo ello?
 
Nadie mejor que el Párroco nos puede contar los acontecimientos de cómo se desarrolló posteriormente la idea. En un escrito que se conserva en el archivo parroquial nos dice:
 
Fue en abril de 1971.
 
Aprovechando que una máquina estaba haciendo el camino desde la finca “Sociedad” o “San Miguel” al pueblo.
 
Reuní al pueblo en el centro de A.C.
 
Se puso de manifiesto las dificultades del camino de la ermita, de herradura, ya casi invisible, lleno de monte, causa de que a penas fuese la gente a visitar a la Virgen. Expuse mi deseo de hacer un camino-carril, amplio por el que se pudiese ir a la ermita cómodamente, incluso en coche. Aclaré antes que había cosas más importantes quizá y más urgentes que arreglar en el pueblo, v. g. alcantarillado, pavimentación, traída de aguas.
 
La gente tomó con ilusión la idea. Se formó una comisión: D. Carlos Tello, Manuel Ayala, José Antonio González, Antonia de la Fuente, José Luis González Fernández.
 
Después de dificultades, viajes, entrevistas, cartas para solicitar del dueño del Encinar, permiso para pasar el carril desde el de la Sociedad, por el cuarto del Abortón, directamente a la ermita, hubiera sido sólo tres o cuatro horas de máquina, poco dinero, cuando por fin logré localizar al dueño Señor Barrueta Larrinaga, me contestó un NO terriblemente seco. ¿Causa? El problema del Egido de la Virgen, que él asegura que es de la finca, y el pueblo, de la ermita, según él a cambio de ese favor no lograba él provecho ninguno, todos estos trámites con el dicho señor, fueron de mi cuenta y riesgo.
 
Ya, reunida la Junta, decidimos hacer el carril, si el Sr. Barrueta no se oponía por su camino de siempre siendo la principal dificultad, no el Sr. Barrueta, sino el dinero para hacerlo.
 
Para sondear al pueblo, enviamos a todas las casas un impreso con un sobre para que cada vecino pusiere libremente la cantidad que pensaba dar.
 
Si el sondeo resultaba pobre se dejaba el proyecto, habíamos dicho antes.
 
Recogidos los sobres vimos que contando con que los hijos del pueblo que estaban fuera diesen también, era factible la idea y nos lanzamos.
 
Las chicas del centro de A. C., llenas de entusiasmo recorrieron todas la casas pidiendo direcciones de familiares y  conocidos, que todas dieron con alegría.
 
Escribí una carta, de la que la imprenta hizo mil ejemplares y se repartieron por todos los rincones de España y muchos del extranjero.
 
La gente contestó con entusiasmo según sus posibilidades. Reuní a la Hermandad Sindical, al cabildo, y aún dieron la cantidad, que para el paro se les había dado con el fin de arreglar caminos.
 
El Ayuntamiento ante nuestra solicitud de ayuda, se reunió y sus ínclitos concejales, después de una sesión fría, decidieron dar tan pequeña cantidad que la Junta en pleno la rechazó.
 
El camino comenzó el 7 de Mayo de 1971 y terminó el 16 de Junio del mismo año. La máquina que lo desbrozó cobraba mil pts., hora. Diseñando el camino y acompañando la máquina estuvieron José Antonio González, y el maquinista Jacinto tuvo también entusiasmo, a pesar de que la máquina se fastidiaba con frecuencia. Pasadas las cien horas, las treinta y cinco y media restantes fueron a quinientas pts., más el gasoil que se consumía.
 
El diez y seis de Mayo, día de la fiesta de la Virgen de Tebas, la máquina había llegado hasta la ermita la víspera, con la brigada de obreros echando tierra y allanándolo para que su día pudieran llegar los conductores más atrevidos con sus coches, aún no había puentes en los dos arroyos.
 
Pero ese día llovió a cántaros. El camino se convirtió en un tremendo lodazal. Todos los coches del pueblo y muchos de fuera, ya estaban en la ermita. En un camión los últimos fuimos con la gente, los curas. El camión con la lluvia y el barro se atascó, ni con ramos ni con piedras ni menos empujando, que vaya si lo hicimos, lográbamos sacarlo. La gente en la ermita se impacientaba de nuestra tardanza. Fue en el primer arroyo, a penas al pasarlo. Hasta que vinieron a buscarnos dos tractores del pueblo, ellos nos ayudaron a salir.
 
La fiesta resultó tan entusiasta como mojada. No dejó de llover, cada vez más en todo el día. A pesar de todo se dio con alegría gracias a la Stma. Virgen por ser posible la idea que más o menos todos habíamos soñado, verla con facilidad cuando quisiéramos.
 
La vuelta fue horrible, no hubo coche que no se llenara de barro, incluso nuestro camión volcó y tuvimos que cantando bajo la lluvia volver andando. A pesar de todo no ocurrió nada a nadie y el buen humor no se perdió un momento- ¡Original romería!
 
El camino se dio por finalizado el 16 de Junio. Aunque poner tubos, hacer cunetas y sobre todo los dos puentes supuso un mes más. Los puentes los hicieron los albañiles del pueblo, algunos dieron alguna peonada gratis. Las vigas de hierro, raíles del tren, fueron regaladas. También hubo muchos que dieron peonadas gratis, además de su cuota voluntaria. Otros en vez de cuotas. Fueron pocos los que dieron nada (Se consignan quienes fueron, pero se omiten por respeto) Estos cinco no dieron, los demás con gusto y entusiasmo la mayor parte.
 
En pleno verano, ya con los puentes hechos, se inauguró oficialmente, estaban los de fuera y la fiesta fue entusiasta a pesar de que el barro de mayo fuese polvo en junio.
 
Gracias al apoyo, entusiasmo y generosidad los casitos en esto, la Virgen de Tebas no está olvidada, es muy visitada.
 
Firma: José Mª Sánchez.
 
Ya ha comunicado su idea a los feligreses residentes en el pueblo. Pero sabe que hay muchos “casitos” esparcidos por la geografía hispana y extranjero, que suelen llevar su devoción a la Virgen de Tebas en su corazón e incluso algunos, su estampa en la cartera.
 
Por ello, para que todos sean partícipes de la obra que se quiere hacer, se lo comunica mediante esta carta. Le mueve también el hecho que expresa en dicha misiva y que dice:
 
“Os digo con sinceridad que al ocurrírseme la idea pensé mucho en vosotros; veía como en vuestras vacaciones el difícil camino de Tebas era un rosario de visitantes, muchos andando, otros en caballerías, cada vez más difícil de encontrar, los mayores sólo con el deseo contentándose con una estampa, enviando una vela a la Virgen o encargando una misa en la Parroquia.” (De carta que se encuentra en el archivo parroquial).
 
Y están implicados todos los devotos de la Virgen de Tebas. Ya se sabe cómo han respondido todos ellos y ha sido posible el camino de Tebas, por el que ahora se puede ir más cómodamente, aunque siga habiendo quienes quieren dar a su devoción un sentido de peregrinaje yendo a pie.
 

Faltaría un dato importante si no se consignase aquí, respuesta a la pregunta que siempre se hace. ¿Cuánto costó?
 
También consta en algún documento que hace el resumen final:
 
1971:
 
Camino de Tebas, hecho por suscripción voluntaria de los vecinos, de los casitos que están fuera y del dueño de “El Encinar”, que al revalorizarse su finca da el 30 %.
 
     Ingresos:        297.239,00 Pts
     Gastos:          282.529,00 Pts
     Resto a favor:  14.610,00 Pts

 
En el archivo parroquial se encuentran listas de las aportaciones que hicieron los feligreses para todo este asunto, así como también se encuentra en dicho archivo la correspondencia de quienes expresaron al Párroco su alegría por la idea de hacer dicho camino.
 
Pero todo necesita mejoras. También el camino a la ermita de la Virgen de Tebas. La última actuación sobre dicho camino se realiza en 2009. Ya se hace transitable plenamente para vehículos. Se hace a través de las actuaciones del Parque Nacional de Monfragüe, interviniendo de forma mediática el Exmo. Ayuntamiento. Su importe ascendió a 90.000,00 € y la realiza TRAGSA. (Datos facilitados por el Ayuntamiento y amabilidad de Pilar).

martes, 6 de marzo de 2018

Imagen y Ermita de Nuestra Señora la Virgen de Tebas (y II)

Historia

Toda la gran devoción que anteriormente hemos constatado empieza a hacerse historia escrita, cuando en los archivos parroquiales nos encontramos con los libros de la Cofradía de Nuestra Señora, la Santísima Virgen de Tebas.
 
Ya en 1560 tiene lugar la revisión de los libros de la Cofradía por parte del Visitador. Así lo hace constar en las primeras páginas del libro primero (1558-1668): “En el lugar de casas de Domillán a veinte días de a mes de febrero de mil quinientos y sesenta años visitando el muy…”
 
Debemos de tener en cuenta que hasta el siglo XVI no se ponen en marcha los archivos parroquiales, en los que había que consignar los bautizados, los casados, los difuntos, amén de los libros de cuentas de las diversas hermandades o cofradías. Aquellos, con el fin de controlar la “pureza de sangre”. Estos para el control económico.
 
Por eso en los primeros años de este libro, lo que más resalta es la consignación de censos y rentas de la Hermandad. Este dato nos indica que esos censos no eran recientes, sino que venían pagándose con anterioridad.
 
El censo era el contrato por el que un inmueble se sujetaba al pago de una renta anual, renta que en este caso tenía que abonar a la Cofradía.
 
Todavía en este primer libro se está jugando con la denominación de Tiebas y Tebas.
 
La existencia de la ermita es clarísima, puesto que en el año de 1616 sabemos que se construye el soportal de la ermita. No consta la factura de la ermita, ni de qué tipo es. Probablemente es pequeña, puesto que como veremos más adelante tiene reconstrucciones posteriores y ampliaciones.
 
Por los libros de fábrica de la Parroquia nos consta en 1634 la existencia de las ermitas de Tebas, Santa Marina, Los Mártires, Sta. Lucía. Es más, en dichos libros el visitador les amonesta a los mayordomos de Santa Marina y Tebas, de la indecencia de las ermitas, ya que se da una fuerte plaga de golondrinas.
 
Tampoco nos consta la originalidad de la imagen, puesto que nos encontramos con diversas intervenciones en dicha imagen. No olvidemos que los “casitos” han ido haciendo lo mejor para su patrona, y que en cada momento han aplicado los gustos de la sociedad.
 
Sí, sabemos que la imagen en 1682, se renueva en Brozas por Francisco Flores y costó 6,800 maravedíes. Esta renovación hay que entenderla; no que se compra una nueva, sino más bien que se restaura.
 
Era costumbre entonces que las ermitas tuvieran su ermitaño. En Casas de Millán lo hay casi en todas, no siendo en las que están cerca o en el interior del pueblo. Por ello en 1684 se hace una casa con doblado a fin de que pueda establecerse el ermitaño.
 
Como todo mantenimiento de edificios hay que hacer inversiones en ellos. En el año de 1687 el Maestro de arquitectura Juan González Arroyo, vecino del pueblo, realiza una obra importante, aunque no se dice en qué consistió.
 
Así consta en la inscripción en la base de la bóveda que dice:

“ESTA CAPILLA SE HIZO DE LIMOSNA
POR EL LUGAR SIENDO MAYORDOMO
FRANCISCO FRANCO FAMILIAR DEL SANTO OFICIO
QUE FUE EL MAESTRO JUAN CONZÁLEZ
ARROYO AÑO DE MIL SEISCIENTOS Y OCHENTA Y SIETE”

Se hace constar en esta inscripción la edificación de la capilla, no de la ermita. La Capilla es la denominación de un tipo de oratorio o lugar de culto en la religión católica. Arquitectónicamente puede ser independiente o formar parte de un edificio mayor, habitualmente una iglesia o un palacio.
 
No solamente el edificio de la ermita es objeto de cuidado. También la imagen. La Hermandad, en las cuentas de 1690 hace constar que se compra una corona de plata para la Virgen, que supuso un desembolso de 195 reales, es decir 6,630 maravedíes.
 
Nuevamente se manda hacer inventario de las propiedades que tiene la ermita de Ntra. Sra. de Tebas. En él constan tanto las fincas, como todo lo necesario para el culto de la Virgen.
 
Van a pasar bastantes años sin que tengamos noticias de los acontecimientos del pueblo en relación con la Virgen de Tebas. Es de suponer, que lo ordinario del acontecer de los años. Romería, fiestas, visitas etc.
 
En el año de 1791, tuvo que haber una obra de ampliación, que probablemente hubo que cimentar bien, pues se nos queda consignado que “sacando la piedra a base de barrenos”.
 
Este mismo año se planta el olivar de Tebas en el alcacer que tenía la ermita, siendo cura D. Francisco Gutiérrez Garay.
 
Poco más encontramos en el archivo parroquial digno de mención. Debió interrumpirse el seguimiento de anotaciones en los libros, puesto que en la visita del año de 1815, se hace advertencia por no tener cuentas.
 
No obstante, como se indica en las anotaciones de la hermandad de San Sebastián, hay una referencia a la ayuda que dicha hermandad hace a la de la Virgen de Tebas. Parece que económicamente San Sebastián andaba mejor que las otras. Así en 1859 se consigna en sus cuentas:
 
Son data primeramente 400 reales que entrega este Mayordomo al de la ermita de Tebas en calidad de reintegro a excitación del Sr. Alcalde Narciso Marcos, y de acuerdo con el Sr. Cura; cuya cantidad hizo falta para acabar de pagar los gastos de poner una viga, componer los tejados y retocar los santos y altar de dicha ermita, que amenazaba ruinas, quedándole a deber a la ermita de Tebas a la de San Sebastián, los dichos 400 reales.
 
Quede reseñada esta obra que se hace en la ermita, pero que no tenemos noticia de ella en sus libros.
 
De 1872 a 1920 hay un salto de anotaciones
 
A partir del año de 1922 podemos tener algunos datos que brevemente quiero consignar, para que quede constancia de la devoción enraizada en el pueblo, que ha llegado hasta nuestros días, al mismo tiempo que se relatan los hechos ocurridos y protagonizados por muchos de los que hoy siguen manteniendo dicha devoción.
 
Como en otras ocasiones anteriores, visto el deterioro que sufre la imagen por el paso del tiempo, se decide restaurarla. A la calle Bordadores nº 7 la llevan los correspondientes mayordomos, en Madrid. Allí trabaja D. José Alsina, restaurador profesional, que realiza, según las crónicas, “un trabajo muy estimable”. En dicha restauración hay un detalle importante: “la imagen del Niño se hizo nueva”. Y, como en todo lo referente a la Patrona, fue todo el pueblo el que puso su granito de arena. El importe de dicha restauración fue de ciento doce pesetas, “que se recaudaron por suscripción”. Festivos y alegres, como siempre, pudieron los “casitos” celebrar su ROMERÍA, el 14 de mayo.
 
Pero como siempre, los devotos de la Santísima Virgen de Tebas, quieren superarse. Quieren que la Virgen luzca en su cabeza una corona de plata, digna, puesto que hacía ya tres o cuatro años que, aunque la tenía, no se la ponían por estar muy deteriorada. Se la habían llevado a un “orifice” de Garrovillas, que la dejó decente para que en la romería de 1924, pudiera lucirla. La admiración embargó el corazón de los fieles que habían acudido, dando por bien empleadas las 72,50 pesetas que se habían gastado.
 
Un hecho luctuoso de hacía pocos días empañó un poco los ánimos de las romería de 1926, puesto que un matrimonio, había sido alcanzado por un rayo y habían muerto.
 
Aunque no está directamente relacionado con la devoción a la Sma. Virgen de Tebas, sí tiene que ver con algo que posteriormente va a tener sus repercusiones.
 
En este año se consigna la contribución anual que se paga por el “egido” de la ermita, al igual que en años sucesivos.
 
Será en el año 1929 cuando comienza la labor pastoral de D. Modesto Rodillo en la parroquia de Casas de Millán.
 
Bajo su labor pastoral se consigna un hecho que sigue denotando la devoción a la Virgen de Tebas. El año 1932 se pone en escena por aficionados del pueblo la obra teatral “Los Domadores” con el fin de recaudar dinero.
 
Es sobre todo, después de los acontecimientos bélicos civiles de los años treinta, aproximadamente hacia el principio de los años cuarenta del siglo pasado, cuando comienza una cierta hostilidad entre el dueño de la finca El Encinar, a la sazón D. Luis Barrueta y D. Modesto Rodillo, tratando de defender uno y otro la extensión del egido de la ermita. En la comunicación por carta que tienen el 12 de Abril de 1940,  quedan en entrevistarse, cuando D. Luis venga por la finca, para que cada uno, aportando sus títulos de propiedad o documentación similar, se puedan poner de acuerdo. Por parte del Párroco en una nota que consta en el archivo se aporta lo siguiente:
 
Medidas del ejido de Tebas:

Nº registro catastro
Polígono
Polígono
Propietario
Hectáreas
Áreas
Centiáreas

1378

1

87
Tebas Ribera del Castaño

2

64

28
1824
2
164
Id
1
98
45



Total
4
62
73
 
No debieron quedar muy de acuerdo puesto que como consigna el hijo de D. Luis, D. José Luis Barrueta Larrinaga, con motivo de una carta remitida al Párroco de Las Casas, cuando se trata de hacer el camino a Tebas, dice expresamente: “no puedo olvidar los disgustos que a mi pobre padre le dio el buen Don Modesto a causa de la ermita, que estando un día en misa mis hermanas, el sermón fue mitinesco hablando de que los caballos del Encinar están pisoteando a la Virgen de Tebas”.
 
Debieron quedar las cosas bastante encontradas, puesto que no consta que se resolviera por parte ninguna el asunto, que, como se ve posteriormente, aparece cuando se trata de hacer el camino nuevo a la ermita.
 
No se han podido aclarar unas obras que se hicieron en 1941, de las cuales solo hay una nota que dice:
 
Se da cuenta del presupuesto de las obras Ntra. Sra. De Tebas en el pueblo de Casas de Millán, cuyo importe asciende a 14.998,00 pts. El Maestro de obra fue Joaquín Ollero.