“No se pone la luz para meterla debajo de un celemín, sino para que a lumbre a todos los de casa”
Y en la casa del mundo se vieron alumbrando las luces de aquellos, nacidos en Casas de Millán, llevando la luz del Evangelio.
Si hemos visto la riqueza de la Iglesia de Casas de Millán, tanto en los grandes hijos de ella, aunque no tanto en el edificio, ahora nos vamos a adentrar en la Iglesia viva, construida, con piedras vivas. Si hoy seguimos admirando dentro de la Iglesia Católica la pureza del cristianismo en los misioneros, tenemos muestras de esa pureza en los muchos misioneros que este pueblo tiene, así como religiosos que pusieron su vocación en distintos puntos de la patria.
Además del gran misionero que fue Miguel del Barco, tenemos otros que también cogieron la antorcha de la luz de la fe, y cual portador de una antorcha olímpica, la llevaron para encender la luz del evangelio y alumbrase por Filipinas y el Nuevo mundo.
Por cierto, que sorprende el número de religiosos franciscanos que han nacido en Casas de Millán. Es de suponer que aquí, donde se hospedaba con frecuencia en sus correrías o sencillamente venía al pueblo desde el “conventito de El Palancar”, pues tenía una familia especial donde se alojaba, dejó una luz esplendente, el gran místico y asceta Fray Pedro de Alcántara.
Hay dos declaraciones de “casitos” en el proceso inicial, en Plasencia para su beatificación. Lo cuenta, José María Domínguez Moreno en su libro de “San Pedro de Alcántara y los Milagros del agua”
Refiere primeramente cómo en algunas ocasiones, cuando iba de pueblo a pueblo y tenían que aguantar los chaparrones y granizadas, él y su compañero, terminaban sin haberse mojado. Pero también era verdad que “lejos de buscar el remedio en el Señor, recibe el chaparrón con verdadero placer y como un acto de devoción hacia los divinos acompañantes que marchan a su lado. Así lo expresa el alcalde de Casas de Millán, Juan del Arroyo, en el Proceso de Plasencia, en el año 1616”
Todos sabemos que aquí realizó uno de los milagros que se adujeron en el proceso informativo que anteriormente se ha citado.
Lo presentó María Núñez, que fue una testigo de ello.
Cuenta que un hombre vecino de este lugar, de cuyo nombre no se acuerda por hacer tanto tiempo y ser esta testigo entonces muchacha, llevó a una niña hija suya que tenía cuatro años, poco más o menos, la cual estaba tan enferma de los ojos que no vía de ninguna manera. Sus padres la habían llevado a una ermita que llamaban de Agua sancta, por estar allí una fuente con cuya agua han sanado muchos enfermos de lepra y sarna y otras enfermedades, pero la niña no sanó.
Por cierto que Margarita Tornay Cabrera hace notar que:
“…creemos que es posible ubicar aquí una referencia a San Pedro de Alcántara que aún no ha sido desentrañada por sus biógrafos. Nos referimos a uno de los milagros recogidos en el denominado Proceso de Plasencia y que afecta a una niña de Casas de Millán a quien su padre había llevado a una “hermita que llaman de agua santa” con la esperanza de que recuperara la visión.”
Se trata del convento de Fuen Santa de Galisteo, ya desaparecido.
Habiendo llegado S. Pedro a la casa de la familia de la declarante del milagro, y entrando con el padre en la casa de sus padres a donde ”estaba el dicho fr. Pedro, como dicho es, se la puso delante y pidió la echase su bendición y él se la dio y tocó con su mano los ojos de la niña diciendo: Dios te sana, y que de allí a un día o dos, dijo su padre de la niña cómo desde que la tocó el dicho padre fr. Pedro su hija tenía vista; y esta testigo la vio sana y buena”.
Es muy posible que los casitos hayan mantenido secularmente esa tradición de ir al Palancar a agradecer este milagro y favores recibidos de S. Pedro. El día de la porciúncula se gana la indulgencia plenaria. Es el 2 de Agosto.
Retomando el asunto de los seguidores de Francisco de Asís aclaramos que de algunos de dichos franciscanos no tenemos muchos datos, pero los suficientes para ver la ubérrima cosecha que con el tiempo recogió aquí el Santo Alcantarino.
Hay tres religiosos franciscanos que bien puede conjeturarse, que pudieron tener la influencia de los religiosos del Palancar, puesto que los tres son descalzos, que, como es sabido, eran consecuencia de la reforma que S. Pedro potenció.
Son:
PEDRO ARROYO RODRÍGUEZ, FOM. Descalzo
Hijo de Juan y Catalina, que nace el 7 de Marzo de 1655.
FRANCISCO CLEMENTE JIMÉNEZ, FOM. Descalzo
Hijo de Francisco e Isabel nacido el 24/08/1635.
DIEGO FABIÁN DEL BARCO MIGUEL, FOM. Descalzo
Nacido el 10/11/1708, hijo de Diego y María.
Ingresó el año 1728.
JUAN CLEMENTE ARROYO FOM.
Hijo de Juan y María; cuyo nacimiento ocurre el 30/11/1643 Lector jubilado. Fue Prior en la provincia de S. Miguel y visitador en la de los Ángeles.
(Un lector académico es un profesor que enseña y explica en su lengua materna en universidades extranjeras).
FRAY PEDRO GIL GÓMEZ, FOM
Solamente tenemos referencia por que aparece en un testamento… nació el 21/11/1564. Sus padres Pedro y Francisca.
FRAY ENRIQUE ESCRIBANO GONZÁLEZ, FOM.
Ya tratado.
Hay otro grupo que podríamos encuadrar entre los misioneros franciscanos:
FRANCISCO GÓMEZ ROSADO: FOM.
Ingresó en la provincia de S. Miguel. Partió en 1706 hacia Yucatán, junto con 7 hermanos franciscanos. Nació el 18/12/1680, del matrimonio de Alonso y Catalina.
DIEGO ROSADO GONZÁLEZ, OFM
Hijo de Diego e Isabel. Nace el 7/05/1677
NICOLÁS ROSADO Y CANTOS O de S. JOSÉ: OFM
Nace el 2 de Diciembre de 1706. Profesó en la de S. Gabriel el 16 de Marzo de 1729. En Filipinas comienza su misión en 1743. Fue a las misiones de China en 1744 y regresó en 1746 a Manila, siendo ministro en Daraetan en 1751. Por haber enfermado pasó a Sta. Cruz en 1751 y allí ocurrió su óbito el 26 de Enero de 1756
SEBASTIÁN FLORES ROSADO: FOM.
Nace el 27/01/1626 y sus padres se llamaban Juan y Catalina.
Entra en religión en 1742, iniciando su labor religiosa en el año 1750 en Querétaro en compañía de otros seis franciscanos.
Historia y encanto de las misiones de la Sierra Gorda (Querétaro)
Querétaro es uno de los 31 estados que conforman las 32 entidades federativas de México. Su capital es la ciudad de Santiago de Querétaro.
BERNARDO DE LOS REYES: OFM
Nace en 1715, profesó en la provincia de S. Gabriel (1739) y llegó ese mismo año a México. Su actividad fue puramente conventual en San Francisco del Monte y San Francisco de Manila. Murió enfermo de lepra en S. Lázaro 1772.
Aparece citado en una carta de Fr. Juan Rino de Brozas a Fr. Antonio Oliva Comisario de la Nueva España el 14 de Julio de 1757.
JUAN ANTONIO BLÁZQUEZ ARROYO. OFM
Felipe y Ana eran sus padres, que le vieron nacer el 28/04/1666 Misionero Apostólico y Predicador de su Majestad.
(Los misioneros apostólicos establecen nuevas bases de misión en una región.)
FRAY ANTONIO TREJO Y PANIAGUA. OFM
Como hemos referido, su vocación franciscana nace en Salamanca.
PEDRO DÍAZ DÍAZ, FMO
Era hijo de Pedro y Felipa que nació el 29/03/1643, fue religioso franciscano y murió en Jerusalén, donde asistió más de 30 años.
JUAN RODRIGUEZ SÁNCHEZ, FMO
Nace el 7/05/1572 y es hijo de Alonso y Elvira
FRANCISCO RODRÍGUEZ SÁNCHEZ, FMO
Nace el 3/10/1574 y es hijo de Alonso y Elvira
JUAN BLAZQUEZ DEL BARCO. FMO
Fuente (*): Añadimiento del Comisionado Real Asensio Morales y Tercero. Manuscrito -folio 436-
“Falleció en el convento de La Moheda el 1o de Febrero del año 1.726. El reverendo padre Fray Juan Blázquez del Barco, natural del lugar de Casas de Millón jurisdicción de Plasencia, e hijo de esta Santa provincia y todos padre de ello.
Predicador de su majestad Católica con ejercicio, misionero apostólico en los reinos de Castilla y Portugal, tan celoso en el santo ministerio, como lo demuestra en lo infatigable de sus ejercicios, repetidas conversiones, que se experimentaron no sólo en las almas católicas sino en herejes y moriscos, de los que se bautizaron dos atraídos de lo ferviente de su celo.
Acabando « entre los muchos que predicó en la corte de Madrid » de predicar, como tan ardiente en el ejercicio apostólico, mereció compañía tan honrosa como irle a acompañar el eminentísimo señor cardenal don Carlos de Borja, de quien fue consultor, al pulpito.
Fueron tan numerosos los concursos que concurrían a oírle, que hubo día que pasaron de 20.000 personas, porque se hacía preciso predicar fuera de los templos, para que todos participasen del alimento de sus doctrinas. Tuvo voz tan sonora, que afirman oculares testigos oírse un cuarto de legua, oyéndose con tanta claridad el distante como el cercano oyente. Atendíanle en el púlpito, como si fuera un oráculo. Murió, verdadero religioso, en este de la Moheda, en donde se ejercitó en las virtudes, sin cesar, aunque muy cansado, en sus apostólicas tareas. ”
FRAY FRANCISCO SANTOS: FMO
Fuente (*): Añadimiento del Comisionado Real Asensio Morales y Tercero. Manuscrito -folio 440-
“En el año de 1738, a 8 de Mayo, murió en este colegio «La Moheda» el padre fray Francisco natural de Casas de Millón, obispado de Plasencia, verdadero religioso e hijo del padre S. Francisco como se colige de la siguiente visión que instado del precepto de obediencia reveló”.
“Siendo vicario, antes de ser este convento erecto en seminario, habiendo salido de la portería, llegó un pobre de tan venerable aspecto a su presencia, que robó su modestia la atención. Mandó componer unos huevos para remediar su necesidad y en el ínterin, quedóse en conversación con él. Quién le dijo hablando impersonalmente, que habían de poner en este convento unos varones apostólicos, que fueren identificación y ejemplo de los circunvecinos pueblos. No atendió el religioso por entonces lo propuesto, a causa de no tratar de erección de seminario, pues, aunque a poco tiempo se solicitó, fue señalado otro convento. Trajeron los huevos, para que comiera el pobre y el padre fray Francisco se entró dentro, ínterin que que formaba su alimento. Apoco tiempo, salió el dicho religioso, llevado del afecto que había al pobre profesado, cuando halló que el pobre se había ausentado, sin haber tocado a los huevos. Por repetidas diligencias que se hicieron, no se pudo encontrar al pobre, hasta que yendo el religioso al siguiente día a celebrar la misa, al fijar los ojos en cristo, en su imagen de Ecce Homo, alterado el corazón y herido en su peregrino rostro le pareció ser tan semejante, que en nada discernía del pobre que se había ausentado el antecedente día.
Erecto, en poco tiempo, este convento en seminario, parece se infiere ser merced de Dios hizo a este religioso. Quien continuó en dicho colegio, siendo religioso de ejemplo.”
NICOLÁS RUBIO MARCOS OFM
Es la última pérdida religiosa nacida aquí, que ha ocurrido el 20 de Mayo de 2016.
Había nacido el 12/11/1931. Sus padres eran Narciso y Patrocinio.
Su niñez la desarrolla entre la alegría de su familia compuesta de varios hermanos.
Como todo aspirante a franciscano pasó por Fuente del Maestre y el noviciado de Loreto, terminando sus estudios en el Monasterio de Guadalupe.
Allí hizo su profesión solemne de votos religiosos perpetuos el día 23 de Noviembre de 1952.
Recibió el presbiterado en Cáceres el 12 de Mayo de 1957, de manos del Sr. Obispo de Coria, D. Manuel Llopis Iborra.
Sus últimos años los pasó en Málaga donde fallece.
Sus superiores le mandan como profesor al convento que tiene los franciscanos en Cáceres.
Puentegenil, Canarias y Málaga son sus destinos posteriores. En esta última ciudad pide la secularización que se le concede y donde fallece.
(*) Hª. Placentinae Inéditas. 1a parte. Catálogus Episcoparum ecclesiae placentinae. Volumen C. Cáceres 1.985. págs. 167-169